Existe un mito muy común de que las placas solares solo son eficaces en verano y que en invierno su rendimiento se ve drásticamente reducido. En este artículo, desmitificaremos esta creencia y exploraremos la función de las placas solares durante los meses más fríos del año.
Para entender el funcionamiento de las placas solares en invierno, es importante comprender cómo generan energía en primer lugar. Las placas solares están compuestas por células fotovoltaicas que convierten la luz solar en electricidad y, estas células, están diseñadas para absorber la radiación solar, incluso en días nublados o con poca luz. Por ello, aunque haya menos horas de sol disponibles durante el invierno, lo que aporta energía a las placas no es el calor, sino la luz. Por lo tanto, la ausencia de calor en invierno no limita la acumulación de energía, y menos aún en las Islas Canarias, que cuenta con uno de los niveles de radiación solar más altos de Europa, incluso en invierno.
Entonces… ¿las placas funcionan en los días nublados?
Si bien es cierto que los días nublados se caracterizan por la ausencia del sol, esto no impide que la luz llegue a las placas solares. La energía que se absorbe viene tanto de la luz visible como de una gama de distintas longitudes de onda, muchas de las cuales pueden atravesar la capa de nubes sin problema. De hecho, algunos tipos de nubes, principalmente las blancas y esponjosas, pueden ayudar a disminuir la temperatura de los paneles y optimizar así su rendimiento. Esto sumado a los avances tecnológicos en la industria de la energía solar, hacen que las placas solares sean capaces de generar energía incluso en condiciones de baja luminosidad.
Es importante tener en cuenta que la temperatura fría del invierno puede beneficiar el rendimiento de las placas solares, ya que el exceso de calor puede reducir su eficiencia.
Además, una instalación fotovoltaica con placa solar puede ir acompañada de baterías que almacenen la energía restante para aquellos días más fríos o nublados.
Rendimiento de placas solares en días de lluvia y nieve
El clima adverso, como la lluvia o la nieve, es otra de las preocupaciones más comunes cuando se trata del rendimiento de las placas solares. Pero lejos de que esto sea un problema, estas instalaciones están diseñadas para resistir y funcionar de manera eficaz en todo tipo de clima, incluido el adverso.
Las placas solares están fabricadas con materiales duraderos y resistentes, como vidrio templado y marcos de aluminio, diseñados para soportar la exposición a diversos elementos climáticos. La lluvia, por ejemplo, no afecta el rendimiento de las placas solares, ya que el vidrio y los materiales protectores evitan que el agua penetre en el interior de los paneles. Incluso en condiciones de lluvia intensa, las placas solares seguirán generando energía de manera eficiente.
En cuanto a la nieve, es posible que se acumule en la superficie de las placas solares durante el invierno. Sin embargo, esto no significa dejen de funcionar. La mayoría de los sistemas de placas solares están diseñados con una inclinación que permite que la nieve se deslice fácilmente de la superficie de los paneles.
Las energías renovables, como la solar, son clave para un futuro sostenible y son una opción prometedora tanto a nivel particular como de empresa. Desde Canarias Autosostenible tenemos un gran compromiso y te acompañamos en tu transición a las energías renovables durante todo el año. ¡Contáctanos!
